Las ayudas del gobierno alemán para la compra directa de automóviles está originando situaciones paradójicas en las plantas españolas como la de Ford en Valencia, donde mientras unos trabajadores están haciendo horas extras los fines de semana (porque a «Merkel» le hacen falta más Ford Fiesta), otros están en casa parados por los EREs. En otras plantas se habla de reducción de los EREs.
La falta de una industria del automóvil en manos nacionales y la deendencia de unos pocos mercados europeos se hace sentir en este tipo de vaivenes que, eso sí, tienen fecha de caducidad. En diciembre se acaban. ¿Y después qué?Tras el éxito de las primeras ayudas a los compradores de coches, el Gobierno alemán acordó la pasada semana elevar de 1.500 a 5.000 millones de euros el presupuesto para las ayudas directas. Las ayudas son de 2.500 euros para quien achatarre un coche de más de 9 años de antigüedad y compre uno con baja emisión de CO2. Que el estado alemán incentive con ayudas el consumo en un sector como el del automóvil se entiende, aunque se trate de una medida burocrática y paliativa a corto plazo. La compra de vehículos fabricados en Alemanía sigue creciendo. Lo ha hecho un 27% en marzo y acumula un aumento del 9% en el primer trimestre. La repercusión sobre las fábricas ubicadas en España es ostensible. En Alemania, el Ford Fiesta fabricado en Almussafes, Valencia, tuvo un 294% de aumento de ventas en febrero respecto al mismo mes de 2008. Detrás va la furgoneta ligera Partner que fabrican en PSA-Peugeot Citroen Vigo, cuyas ventas han crecido un 291%. De los fabricados en España, el SEAT Ibiza producido en la planta de Martorell aumentó sus ventas un 83%. Las matriculaciones del Polo producido en la planta de Landaben, Pamplona, se dispararon el 52% en febrero, hasta alcanzar los 8.889 vehículos, que en marzo dio otro salto exponencial hasta 17.577. Otros vehículos fabricados en España que han registrado un aumento de las ventas fueron el Peugeot 207 fabricado en Villaverde (Madrid), con un subida de las matriculaciones del 20%; el Opel Corsa ensamblado en Figueruelas, con una subida del 18%; y el Ford Focus, que se fabrica en Valencia –entre otros centros– y que se vendió el 6,6% más.En España, incubar la idea de que esta es la única salida a la crisis del sector es directamente cavarle la tumba.