Con este cambio de planes, mejoran las perspectivas de la fábrica que tiene el grupo en Nissan en Barcelona. La principal fuente de agobio para la planta de Barcelona desaparece. No son ajenos estos hechos a la delicada situación que tiene el grupo y que recientemente anunció los malos resultados que prevé recortar hasta 20.000 puestos de trabajo a nivel mundial en los próximos meses. A pesar de todo, fuentes de la empresa inciden en que la planta de Barcelona está sobredimensionada y que a largo plazo ha de reducir rl número de empleos si quiere ser rentable. En este sentido no se ha avanzado mucho en este tema. La empresa habla de suprimir hasta 1400 empleos mientras que los sindicatos prosiguen las negociaciones.
Por el momento la dirección del gruo Nissan no ha concretado la decisión de las furgonetas X-11 y X-81 que tenía previsto fabricar en Tánger. Si bien la fábrica de Barcelona, si hace los deberes, puede optar con ventaja saber otras plantas del grupo. En este punto los sindicatos piden más concreción a la empresa en cuanto al plan de producción previsto en los próximos años, modelos a fabricar, número de unidades, inversiones a realizar, etc. Creo que aunque haya más despidos en la fábrica de Barcelona, lo peor ya ha pasado, ahora es cuestión de ponerse a trabajar para mejorar la eficiencia en todos los procesos, mejorar los productos, recuperar la cuota de mercado…de esta forma también puede recuperarse empleo en un futuro, una vez la estabilidad económica del sector y del país se haya consolidado. Hoy mismo, otro grupo industrial automovilístico, Volkswagen, el primero de Europa y con plantas también en España ha anunciado descensos de ventas a nivel mundial del 21% en el mes de enero. Una cifra que contrasta con los tímidos aumentos de venta del año 2008 o su aguante financiero en los mercados bursátiles mundiales (está en el grupo de las que menos bajan). Y es que cuando VW vende un 10% menos en China hay que volver la cabeza a los países desarrollados y ponerse las pilas, aunque sean chinas.