«En la mañana del lunes en Berlín, la canciller alemana, Angela Merkel, reunió a periodistas en una rueda de prensa de aproximadamente seis minutos de duración sobre el desarrollo de los acontecimientos. «Me alegro de que se haya realizado correctamente, el asesinato de Bin Laden», dijo. Esa declaración está siendo muy criticada en círculos políticos y religiosos de Alemania, en particular entre los miembros del propio partido de Merkel, la Unión Demócrata Cristiana (CDU).»
Y el ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Guido Westerwelle, del artido los Demócratas Libres (FDP) en coalición con Merkel, ha hecho un llamamiento a las naciones occidentales a moderar sus respuestas a la noticia de la muerte de Osama bin Laden. "Debemos tener cuidado, en Occidente, de no enviar imágenes al mundo que puedan volver a conducir a la incitación o la heroización de al-Qaeda", dijo al diario conservador alemán Die Welt el miércoles. (DER SIPEGEL) DIARIO DEL PUEBLO.- Pero a pesar de constituir un duro golpe a las organizaciones terroristas, la muerte de bin Laden no implica que éstas dejarán de existir. Hay una nueva generación de organizaciones extremistas que se sirven de equipos de alta tecnología y notables habilidades para conseguir sus fines, a la vez que ganan fuerzas y amenazan con vengar la muerte del líder. La lucha antiterrorista aún deberá andar un largo trecho. El terrorismo se alimenta de múltiples situaciones que le sirven como caldo de cultivo, entre ellas las desigualdades económicas y políticas, las prácticas hegemónicas, la discriminación racial y la confrontación ideológica. A ellas se suman la mentalidad de la Guerra Fría, de la cual se valen algunos países para intervenir en otros estados. Alemania. Der Spiegel Críticas a los comentarios de Merkel sobre el asesinato de Bin Laden El lunes, la canciller Angela Merkel dijo que estaba "contenta" por la muerte de Osama bin Laden. Ahora, sin embargo, la crítica a sus comentarios está creciendo – incluso dentro de su propio partido. El ministro de Exteriores alemán Westerwelle, por su parte, pide a Occidente que tenga cuidado en sus reacciones a la noticia. A medida que la noche del domingo se conoció la noticia de que el líder mundial del terrorismo, Osama bin Laden, había muerto durante una redada EEUU en un complejo en Pakistán, los estadounidenses salían a las calles para celebrar la desaparición de la figura que organizó los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, que dejaron más de 3.000 muertos. En la mañana del lunes en Berlín, la canciller alemana, Angela Merkel, reunió a periodistas en una rueda de prensa de aproximadamente seis minutos de duración sobre el desarrollo de los acontecimientos. "Me alegro de que se haya realizado correctamente, el asesinato de Bin Laden", dijo. Esa declaración está siendo muy criticada en círculos políticos y religiosos de Alemania, en particular entre los miembros del propio partido de Merkel, la Unión Demócrata Cristiana (CDU). Y el ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Guido Westerwelle, del partido los Demócratas Libres (FDP) en coalición con Merkel, ha hecho un llamamiento a las naciones occidentales a moderar sus respuestas a la noticia de la muerte de Osama bin Laden. "Debemos tener cuidado, en Occidente, de no enviar imágenes al mundo que puedan volver a conducir a la incitación o la heroización de al-Qaeda", dijo al diario conservador alemán Die Welt el miércoles. "No es razón para una celebración" Al mismo tiempo, Westerwelle expresó su comprensión por los comentarios de Merkel diciendo que la muerte de Bin Laden era "una buena noticia para todo el mundo. Creo que es comprensible tener una sensación de alivio que este terrorista que tenía miles de víctimas en su la conciencia no pueda seguir propagando el terror. " La observación de Merkel se produjo al final de una sesión de preguntas y respuestas durante la conferencia de prensa el lunes, y continuó diciendo: "Creo que no sólo para la gente en Estados Unidos, sino también para nosotros en Alemania, es una noticia que uno de los jefes del terrorismo internacional, que mató a tanta gente … haya sido asesinado y por lo tanto no puede actuar más. Eso es lo que cuenta ahora para mí, y por lo tanto he transmitido mi respeto por este éxito al presidente estadounidense." La vicepresidenta del parlamento alemán, Katrin Göring-Eckhardt, le dijo al diario Berliner Zeitung: "Como cristiana sólo puedo decir que no es una razón para celebrar, cuando alguien muere de esta manera." Göring-Eckhardt, un miembro de los Verdes, dijo que Bin Laden debería haber sido detenido y llevado a juicio. Desde la Edad Media Las críticas fueron lanzadas también por miembros del propio partido de Merkel. Siegfried Kauder, de la CDU, y presidente de la comisión jurídica del Bundestag, dijo al diario Passauer Neue Presse: "… Yo no lo habría formulado de esa manera Esos son pensamientos de venganza que no deben abrigarse. Son propios de la Edad Media." Kauder también cuestionó la legalidad de matar a Bin Laden. "El principio de que el fin justifica los medios no tiene ningún fundamento jurídico … Las Naciones Unidas están ahora llamadas a crear leyes vinculantes. Debe quedar perfectamente claro, qué se puede y qué no se puede hacer." Ingrid Fischbach, la vice-presidenta de la CDU en el Bundestag, que es también del Comité Central de los Católicos Alemanes, habló con reservas acerca de la respuesta de Merkel. "Desde el punto de vista cristiano, sin duda no es apropiado para expresar placer por el asesinato selectivo de una persona", dijo a la agencia de noticias alemana Deutsche Presse Agentur. Figuras religiosas también se pronunciaron en contra la declaración de Merkel en la prensa alemana del miércoles. Franz-Josef Overbeck, un obispo católico militar, dijo añ Westdeutsche Allgemeine Zeitung, "No se puede como persona, y sobre todo como cristiano, alegrarse de la muerte de otra persona. Esto también es aplicable cuando esa persona era un criminal violento." DER SPIEGEL. 5-4-2011 China. Diario del Pueblo Desarrollo: la mejor arma para combatir al terrorismo La noticia de la muerte de Osama bin Laden a manos de un comando militar de EE.UU. se ha convertido en foco de atención de la comunidad internacional. El Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, calificó lo ocurrido como "punto de inflexión en la lucha contra el terrorismo", que refleja no sólo la victoria de EE.UU., sino también los esfuerzos mancomunados de la comunidad internacional. Después del 11-S, la amenaza terrorista a la seguridad internacional pareció más cierta que nunca, haciendo que el Gobierno de EEUU declarase una lucha contra el terror, en la cual contó con el apoyo de numerosos países miembros de la ONU, que desde entonces han coordinado y reforzado sus estrategias de enfrentamientro al fenómeno. Osama bin Laden fue acusado como principal cerebro detrás de la atentados del 11 de septiembre, como líder espiritual de la organización extremista Al-Qaeda. La muerte del "terrorista más buscado del mundo" aumentará la confianza en las operaciones anti-terroristas. La muerte de Bin Laden es un consuelo para las víctimas y familiares de los fallecidos durante los ataques del 11-S, así como una victoria política para Barack Obama en la lucha contra el terrorismo, lo que constituirá una baza favorable, si bien temporal, para los niveles de popularidad del principal inquilino de la Casa Blanca, ofreciéndole la oportunidad de adoptar una nueva línea diplomática para enfrentar el terror . Pero a pesar de constituir un duro golpe a las organizaciones terroristas, la muerte de bin Laden no implica que éstas dejarán de existir. Hay una nueva generación de organizaciones extremistas que se sirven de equipos de alta tecnología y notables habilidades para conseguir sus fines, a la vez que ganan fuerzas y amenazan con vengar la muerte del líder. La lucha antiterrorista aún deberá andar un largo trecho. El terrorismo se alimenta de múltiples situaciones que le sirven como caldo de cultivo, entre ellas las desigualdades económicas y políticas, las prácticas hegemónicas, la discriminación racial y la confrontación ideológica. A ellas se suman la mentalidad de la Guerra Fría, de la cual se valen algunos países para intervenir en otros estados. Todos estos fenómenos sociales se confabulan con fricciones nacionales, religiosas e ideológicas para allanar el camino del terrorismo. Es por ello que se precisa de eliminar las causas y no sólo las consecuencias del terrorismo. Como antídoto, la comunidad internacional debe dar mayor importancia al desarrollo, poniendo en práctica los objetivos de desarrollo del milenio y reduciendo el número de personas pobres. De tal suerte se crearán las bases para un nuevo concepto de seguridad. También es menester respetar las diferentes culturas, sistemas sociales e ideologías, promover la democratización de las relaciones internacionales y construir un mundo armonioso entre todos. DIARIO DEL PUEBLO. 5-5-2011