Ni extorsión económica ni financiación pública

Cortar el oxí­geno a ETA

El residente de la patronal navarra, José Manuel Ayesa, ha denunciado que ETA ha elevado la cantidad de su extorsión económica, que exige por carta, a numerosos empresarios navarros, que llega a alcanzar una cifra entre 100.000 y 400.000 euros. Así mismo, ha destacado que se ha producido un aumento del número de extorsionados durante los dos últimos meses. Extorsión, en el País Vasco y Navarra, "no ha cesado en ningún momento desde hace muchísimos años". Pero, en realidad, según decrece la capacidad política y organizativa de ETA, aumenta su voracidad económica para intentar parar su debilitamiento.Para el presidente de la patronal, a esta oleada extorsionadora contribuye "la falta de financiación que acusa la banda por otros canales y la ilegalización de los partidos políticos". Ya que "a ETA no le queda otra opción que los empresarios al no contar con cargos públicos que podrían derivar ingresos". Pero la realidad no es esa todavía. Hay que acabar realmente con todo tipo de financiación pública de ETA, sea a través de asociaciones de todo tipo, supuestamente "de presos, culturales, de fomento del euskera, etc."; sea a través de los cargos electos en los ayuntamientos; y de cualquier otro tipo de disfraz "legal". Hay que cortar completamente el oxígeno económico que le permite mantener a ETA su actividad terrorista.