Muchos se han sorprendido por la calurosa felicitación enviada por la portavoz de EH Bildu en el Congreso a Donald Trump, trasladándole «una sincera enhorabuena» por su victoria en las elecciones norteamericanas, calificadas como «democráticas y vibrantes»
En ella, dirigida al embajador norteamericano en España, Bildu manifiesta su “absoluta disposición, tal y como lo hemos hecho durante estos últimos años, a seguir cooperando y trabajando con el nuevo Gobierno de Estados Unidos”.
Ni siquiera el PP ha hecho público un pronunciamiento tan efusivo tras la victoria de Trump. ¿Qué acerca tanto a Bildu y Trump, aparentemente tan alejados? La respuesta explica muchas de las cosas que han sucedido en España en los últimos 50 años.
En su misiva, Bildu recuerda al embajador norteamericano que“los lazos históricos que a través de la numerosa diáspora vasca unen a nuestros respectivos países son un claro ejemplo de los valores que compartimos ambos”.
¿Cuáles son esos “lazos históricos” de la diáspora vasca con EEUU?«Los herederos de Sabino Arana siguen pensando lo mismo, depositando en la actuación de algún imperio el futuro de sus sueños de fragmentación»
En los años 50, el PNV había refundado sus Servicios de Información, dirigidos por Antonio Irala, que tras obtener la nacionalidad norteamericana trabajaba para el Departamento de Estado yanqui.
Tal fue la colaboración de este nuevo servicio de inteligencia peneuvista con EEUU que el propio Irala llegó a afirmar que “EEUU no tuvo necesidad de enviar agentes autóctonos a algunas zonas, porque los vasco-americanos jugaron ese papel”, refiriéndose a los múltiples batzokis del PNV repartidos por toda Iberoamérica, desde donde recogían información sobre los comunistas y revolucionarios de esos países para entregársela a la CIA.
Estos son los “lazos históricos” que Bildu ahora reivindica como “hoja de servicios” al imperio.
No debe sorprendernos. Bildu sigue aquí también, como en muchas otras cosas, el ejemplo de Sabino Arana, que felicitó al entonces presidente norteamericano tras irrumpir como potencia imperialista arrebatando a España Cuba, Puerto Rico y Filipinas.Con un telegrama firmado por Sabino Arana donde se afirmaba: “Roosevelt, Presidente Estados Unidos. Washington. Nombre Partido Nacionalista Vasco felicito por independencia Cuba por Federación nobilísima que presidís, que supo liberar la esclavitud. Ejemplo magnanimidad y culto justicia y libertad dan vuestros poderosos estados, desconocido Historia, e inimitable para potencias Europa, particularmente latinas. Si Europa imitara, también nación vasca, su pueblo más antiguo, que más siglos gozó libertad rigiéndose Constitución que mereció elogios Estados Unidos, sería libre. Arana Goiri”.
Hoy, los herederos de Sabino Arana siguen pensando lo mismo, depositando en la actuación de algún imperio el futuro de sus sueños de fragmentación.
Bildu sabe que en el entorno de Donald Trump existen personajes como Dana Rohrabacher, uno de los que ha figurado como aspirante a secretario de Estado, defensor del “derecho a decidir” en Cataluña y auspiciador de movimientos independentistas.
Y esperan, extremando sus muestras de sumisión y reafirmando su intención de “seguir cooperando y trabajando” con Washington, poder recibir las atenciones del imperio.