A Zapatero le salen las cuentas… y a Botín también. El Banco de Santander acaba de condonar al PSOE el 98% de la deuda que arrastraba desde 1990, en virtud de los créditos impagados. Botín no solo ha «perdonado» a Zapatero los ingentes intereses de demora, sino que incluso le permite pagar menos que el dinero prestado inicialmente. En total, son más de 33 millones de euros, los que el PSOE deja de pagar al Santander. ¿Una desastrosa negociación de Botín? Comparen los 33 millones que ha dejado de ingresar con los 310.000 millones de dinero público concedidos a la banca en planes de rescate, y comprobarán como esta es, sin duda, una de las «inversiones» más rentables de Botín.
Si usted se retrasa un día en agar una de las cuotas de su hipoteca, el banco le aplicará un salvaje recargo. Pero si la partitocracia deja pasar toda una década sin pagar, la banca le perdonará sus deudas a cambio de futuros favores.Hemos sabido de que el PSOE sólo ha pagado el 2% del recargo por retrasarse 16 años en el pago por créditos vencidos en 1990. Para imponer el chantaje mediático durante el referéndum de la OTAN, el PSOE de Felipe González recibió ingentes cantidades de la banca. Una parte a través de la trama de Filesa, y otra con créditos que los bancos “se olvidaron” de reclamar.Cuando, en 2004, Zapatero llegó a la Moncloa, Botín decidió regularizar la situación. El padrino de la banca había “predicho” que Zapatero “sería un gran presidente”, y había que asegurar la fidelidad con un contrato.Las negociaciones culminaron en 2006 con un negocio redondo para ambos. El PSOE de Zapatero debía al Santander 34 millones de euros en concepto de intereses, pero finalmente sólo pagaron 780.000 euros. De hecho, el PSOE ni siquiera tuvo que pagar la totalidad del dinero concedido en préstamo, ya que Botín le adjudicó “una rebaja” de 1,1 millones.En total, 34,3 millones condonados por Botín a Zapatero. El resultado de los años de gobierno de Zapatero, que han permitido al Santander multiplicar sus beneficios exponencialmente, son suficientemente significativos de los réditos obtenidos por Botín en esta operación.El delegado financiero del PSOE se ha defendido alegando que “en estas conversaciones con las entidades bancarias se han aplicado los mismos criterios que en negociaciones anteriores, que forman parte del habitual proceder en los usos de mercado”.Efectivamente, estos son los “usos habituales del mercado”. La banca financia a los partidos, a través de condonaciones millonarias, y la partitocracia nos impone al conjunto de la población el pago de onerosos tributos para sostener los beneficios de sus patrones.En este caso, el escándalo es todavía más indignante. Zapatero utiliza el enfrentamiento con la iglesia por los matrimonios gays o el aborto para aparecer con una cara “progresista”, mientras en la trastienda es financiado por el primer banquero del país.