55 sociedades científicas en el campo de la salud, representando a más de 170 mil profesionales sanitarios, han publicado un manifiesto de diez puntos para poner la ciencia en el puesto de mando de la lucha contra la pandemia. Debemos apoyarlo masivamente.
Debemos apoyar el manifiesto, y hacerlo en cada punto.
Primero, por el momento en el que aparece.
En un momento de máxima preocupación en el país, preocupación por la salud y por la economía; pero en un momento donde se empiezan a ver claves en las que incidir para combatir los rebrotes, como el refuerzo y el desahogo de la atención primaria, el aumento de las plantillas de maestros o el incremento de la frecuencia del transporte público; en un momento donde es clave la estabilidad y la cooperación institucional y el trabajo conjunto para salir de esta más fuertes… en ese momento aparecen la disputa y la confusión allí donde más ataca el virus, Madrid.
Debemos apoyarlo por la forma de carta abierta, en primer lugar al presidente del gobierno y los presidentes de las Comunidades autónomas que, lejos de buscar abrir más polémica, llama a la unidad. Unidad de acción con protocolos y criterios claros y equitativos, apoyando las iniciativas territoriales diferenciadas, en base a la evidencia científica, y supone un ofrecimiento del conocimiento que encierran estas Sociedades Científicas. Por encima de las diferencias políticas y la burocracia que impide actuar con celeridad.
Debemos apoyar este manifiesto porque exige prevención y que los tratamientos lleguen por igual a todos los ciudadanos del país, independientemente de su edad y condición social y económica.
Y porque propone, sobre la base del compromiso con la inversión en sanidad, la gestión de los recursos de forma “flexible y actualizada”, libre de toda presión por intereses ajenos a la salud y la evidencia científica, con la participación de los que tienen el conocimiento profundo de la lucha por la salud.
Escuchar las denuncias, atender a sus exigencias y aceptar sus ofrecimientos. No debería caber otra respuesta.
Se trata de no sólo de la sociedad española de virología y de sociedades médicas de diversas especialidades, también lo firman múltiples sociedades de enfermería, de fisioterapia, de investigación, de farmacología, microbiología, de especialistas en salud pública, rehabilitación o radiología.
Este manifiesto se suma a anteriores manifestaciones públicas de otros organismos médicos (como la Organización Médica Colegial (OMC) y la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) que reclamaron un mando único sobre las restricciones basándose en recomendaciones de los especialistas, o la petición de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE) para que las farmacias puedan hacer las pruebas PCR y contribuir al rastreo para aliviar la carga de la Atención Primaria. Pero está también en consonancia con la exigencia de “la salud lo primero” y “unidad y solidaridad” expresada en los seis manifiestos promovidos por Recortes Cero desde el mes de marzo, con el apoyo de más de 350 organizaciones, 200 personalidades públicas de todos los sectores y más de 30 mil firmantes (www.unidadysolidaridad.es).
El llamamiento general a apoyar con nuestra firma este manifiesto debe ser respondido en consecuencia. El virus es biológico pero la pandemia nos afecta más, en todos los sentidos, a las clases populares. Poner la salud lo primero es poner la ciencia en el puesto de mando, sin duda, y es el camino que nos interesa a la mayoría. Es una batalla imprescindible para salir de esta con unidad y solidaridad, más fuertes. Está en manos de todos.