El 10 de Noviembre ha sido una segunda victoria popular. Otra. Los votos a los partidos de izquierdas o progresistas, contrarios a los recortes, conforman una clara mayoría: 11 millones de votos frente a los 8’6 millones de PP y VOX.
Una mayoría de votos que cuenta con una sólida base de escaños. Han utilizado el avance del PP y la muy mala y preocupante noticia de que VOX haya pasado a ser tercera fuerza para sembrar confusión, pero la derecha “no suma”. Este segundo partido, en las urnas, lo hemos ganado la mayoría social de izquierdas.
También las élites del Procés han fracasado en su intento de convertir la respuesta a la sentencia en una oportunidad para ampliar su base de apoyo, el pretendido “tsunami” se ha traducido en un pírrico aumento de 7.000 votos a las fuerzas independentistas, que en estos momentos cuentan sólo con el apoyo del 30,5% del censo electoral.
Esta victoria la hemos conseguido en unas condiciones de “Y ahora: más difícil todavía”. La gente de izquierdas hemos tenido que lidiar en esta campaña con varios frentes abiertos. En primer lugar, muchos han tenido que reponerse de la decepción que supuso que el 28-A, teniendo muy buenas condiciones, PSOE y Unidas Podemos no llegaran a un acuerdo y se repitieran elecciones. En segundo lugar, mientras en abril soplaban todavía vientos de crecimiento económico, estas elecciones se han celebrado bajo la sombra de la recesión y la clara amenaza de recortes desde Bruselas. Y en tercer lugar, con la sentencia del Procés, una situación que evidentemente daba alas a sus élites para su planificado “momentum” y a VOX para obtener rédito de ello.
Pues bien, “nos podríamos haber matado” pero de esta curva hemos conseguido salir por la izquierda: el electorado progresista que es mayoritario se ha movilizado y ha ganado. Esto es lo que ha hecho posible que apenas 48 horas después de haberse cerrado las urnas se haya anunciado el acuerdo entre PSOE y Unidas Podemos para formar un gobierno de coalición.
Desde Recortes Cero, en sucesivos procesos electorales, hemos llevado un trabajo activo para que se abrieran paso gobiernos de progreso y en esta ocasión vamos a seguir haciéndolo. La formación ya de un gobierno progresista es la respuesta que se merecen los millones de personas que el pasado 10-N nos volvimos a movilizar por ello. Conseguir que se constituya en estos momentos es clave.
Y es clave porque en esta legislatura desde la Unión Europea está ya anunciado y aprobado con respecto a España un ajuste del presupuesto, es decir un volumen de recortes de 6.800 millones de euros. Es fundamental un gobierno que frente a estas exigencias ponga un dique en la defensa de los intereses de los sectores populares. En especial hay que establecer una línea roja por la defensa del sistema público de pensiones. En el primer acuerdo alcanzado por PSOE y Unidas Podemos se comprometen a que las pensiones suban de acuerdo al IPC, esta es una buena noticia pero no basta. Recortes Cero tenemos como primer punto del programa el Blindaje de las Pensiones en la Constitución para que no se pueda recortar ni privatizar. En esta campaña electoral por primera vez un partido: VOX ha defendido de forma abierta un proceso de privatización de las pensiones, esto es una alarma roja. Es vital blindar como derecho fundamental el sistema público de pensiones constitucionalmente para que ningún gobierno pueda atentar contra él.
Es decisivo también un gobierno progresista para luchar contra las élites del Procés. Ante “la pinza” reaccionaria y xenóboba de Torra y Abascal es fundamental defender que la unidad de nuestro país no está enfrentada a su pluralidad, ambas son inseparables, sólo defendiendo nuestro carácter plural podremos fortalecer nuestra unidad. Y la vez hay que dejar muy claro desde la izquierda que la unidad del pueblo de las nacionalidades y regiones de España es progresista y no es patrimonio de la derecha, al contrario han sido los sectores populares y el pensamiento más avanzado los que han abanderado la unidad democrática de nuestro país, así han hecho todas las constituciones progresistas, así lo han hecho cientos de intelectuales desde Benito Pérez Galdós a Machado, desde Lorca a Celaya.
Recortes Cero en esta campaña electoral hemos encabezado desde la izquierda esta posición. Hemos promovido el manifiesto “Más Procés es Más recortes” suscrito por cientos de intelectuales como Juan Marsé, Javier Cercas, Rosa Montero, Lidia Falcón, Juan José Millás, Fernando Colomo, Antonina Rodrigo y activistas políticos y sociales, luchadores por la defensa de las pensiones, de los derechos de la mujer, de la vivienda…. Un manifiesto que se titula “Más Procés es más Recortes” porque es el momento de denunciar desde la izquierda que el procés nace en septiembre del 2012 rompiendo la unidad del pueblo trabajador en Cataluña que estaba luchando con el 15-M y la Cumbre Social junto con madrileños, vascos, gallegos, canarios… contra los recortes impuestos por gobiernos como los de Artur Mas y Rajoy. Es el momento de convertir este manifiesto en un movimiento social en Cataluña que denuncie la naturaleza reaccionaria del Procés y exija para empezar la dimisión de Torra.