Los nuevos objetivos del FMI para España

El Fondo Monetario Internacional ha hecho público un informe por cual asegura que el crecimiento de España no es sostenible y por ello mismo propone que se tiene que continuar que la venta de las principales empresas españolas y hacer mucho más precarios a los trabajadores

El FMI ha lanzado en su último informe semestral “Perspectivas de la Economía Mundial” una previsión por la que afirma que el PIB mundial va a aumentar un 3’6% este año y un 3’7% en 2018, afirmando que estamos en un proceso de crecimiento y aceleración de la economía mundial.

Pero España, que hasta entonces había mostrado un crecimiento continuado y puesto como ejemplo ante el mundo (el “milagro español” como lo han presentado distintos medios internacionales), según el FMI va a ir a la contra y a experimentar una severa “desaceleración”, que va a pasar de crecer un 3’1% en 2017 a un 2’5% en 2018. Seis décimas de PIB español, que es aproximadamente más de 60.000 millones de euros.

Alerta de que la economía española va a ir en dirección contraria a la corriente general de recuperación económica que está viviendo el planeta. De los grandes países industrializados, sólo Canadá experimenta una “desaceleración” mayor.

Mismas Recetas de Siempre

Ante esta situación, el FMI propone dos soluciones:

El Fondo Monetario llama a la primera “reducir las barreras de entrada a los servicios profesionales”, en lo que califica como “industrias de redes”: un grupo formado por el sector eléctrico y gasista, correos, telecomunicaciones y transporte aéreo y ferroviario.

En otras palabras, permitir aún más la entrada del capital extranjero en las principales empresas monopolistas de capital español para hacerse cada vez más con su control.

Desde el 2015, las acciones del IBEX35 en manos del capital extranjero han aumentado del 41% al 43’5%. Fondos norteamericanos como BlackRock ya se encuentran dentro de 20 de las 35 empresas del IBEX, como Santander, Telefónica, Repsol, ACS, OHL, Gamesa…

La privatización del 49% de las acciones de aeropuertos AENA, las declaraciones en favor de la privatización de RENFE de su expresidente Pablo Vazquez o la venta del 20% de la red de distribución de Gas Natural a Allianz y CPPIB muestran como efectivamente, éstos son los sectores en los que el FMI quiere centrarse para devorar actualmente.

Una penetración del capital extranjero (principalmente norteamericano) que le ha permitido llevarse en los últimos cinco años 67.335 millones de euros* en su participación las empresas del Ibex-35

Pero el FMI quiere más. España debe seguir vendiendo aún más su propio capital y entregárselo a las potencias extranjeras. Ya han puesto el foco en por donde deben seguir el bocado. La oligarquía española debe ceder, y entregarle aún más tributos al imperio en forma de capital español para poder seguir apropiándose de la riqueza que aquí producimos.«El FMI amenaza de una “desaceleración” de la economía española y exige vender más empresas del IBEX35 y más reformas laborales»

La segunda solución consiste en “facilitar la contratación y el despido de los trabajadores” para “acabar con la dualidad del mercado laboral” para acabar con la división entre fijos y temporales. O lo que es lo mismo, acabar con los empleos fijos.

Según el INE, La temporalidad ha aumentado, encontrándose ahora en un 26’5%, o lo que es lo mismo, uno de cada cuatro asalariados está dentro de empleo temporal, la segunda tasa más alta de toda Europa. Y el 60% de los trabajos indefinidos no llega a los 2 años de duración. Pero no están dispuestos a parar sino a seguir profundizando la precarización del mercado de trabajo.

Nos amenazan con sus previsiones para que traguemos con sus medidas. Quieren empleos aún más precario para que se pueda explotar más y mejor a las empresas en España que cada vez más son suyas. Ese es el doble objetivo que persigue el FMI. Perpetuar y profundizar en el saqueo de nuestro país.