Nuria Suárez

«Defender un proyecto de unidad nos corresponde a la izquierda»

“Para redistribuir la riqueza y llevar adelante un proyecto de progreso hay que abrir paso a una izquierda que defienda con firmeza y convicción la unidad de todo el pueblo de las nacionalidades y regiones de España”.

Las declaraciones de Xabier Domenech portavoz de En Comú Podem diciendo que «en Cataluña son necesarias unas elecciones ya» han sido un verdadero mazazo al soberanismo en Cataluña. Un mazazo que ha hecho tambalear la manida “hoja de ruta” independentista. Dos días después Puigdemont anunciaba que “dentro de un año ya no espera ser presidente”, que su encargo como presidente es culminar el paso “de la postautonomía a la preindependencia”. De verdad que es pasmosa la “solidez y firmeza” de estos liderazgos de encargo…

Acierto en el cambio, error en el diagnóstico

Domenech afirma que «un referéndum unilateral no se diferenciaría del 9-N, que no tuvo efectos políticos o jurídicos vinculantes. Fue una movilización popular, pero repetir lo que ya se hizo no creemos que aporte nada de nuevo y no sería una solución» y concluye que la mejor alternativa son unas elecciones. Saludo y apoyo este cambio de posición de En Comú Podem demarcándose del proyecto de Junts Pel Si de convocar un referéndum unilateral que azuza la división entre el mismo pueblo catalán.

Pero siendo este cambio acertado persiste un error en el diagnóstico y en el posicionamiento de fondo. El adelanto electoral es para el dirigente de En Comú Podem la mejor receta para afrontar la “crisis territorial”… No se puede tratar la cuestión de la unidad del pueblo trabajador como una cuestión de «encaje o crisis territorial». Hablar de territorios es en definitiva el punto de vista de Rajoy; es un punto de vista que en vez de ciudadanos o pueblos… ve territorios y negocia con ellos.

De lo que hay que hablar es de la unidad del pueblo que es la clave de bóveda para luchar de verdad por los intereses populares. Sin una gran unidad no hay proyecto progresista capaz de avanzar y aún menos de consolidarse porque los recortes no vienen impuestos por Rajoy – el es un ejecutor – sino por el FMI y el Banco Central Europeo. Las divisiones en el seno del pueblo son heridas abiertas e instrumentos de chantaje para imponernos sus políticas; nadie tiene mayor interés en el enfrentamiento entre catalanes, madrileños, andaluces, vascos… que las grandes potencias.

La “pelota” de la unidad está en el tejado de la izquierda

Es también recurrente en la izquierda decir que el independentismo viene provocado por el centralismo del PP. Pero… “¿vamos a pedirle peras al olmo?”. Ya sabemos que la imposición trabaja por enfrentarnos y que sólo defendiendo el carácter plural de España es posible fortalecer su libre unidad. Pero eso no lo puede hacer el PP, eso nos corresponde a la izquierda. En Cataluña desde la izquierda se ha sido ambiguo y en muchas ocasiones se ha promovido de forma activa el independentismo como si fuera una posición avanzada; en vez de difundir la unidad y la solidaridad del pueblo como los valores progresistas que están en la tradición de la izquierda.

El misterio del cinturón industrial

La evolución del voto en el cinturón industrial de Barcelona es muy llamativa. En Hospitalet, la décimosexta ciudad de España en habitantes en un sólo año cambia por completo la composición del voto y el orden de las candidaturas. En las elecciones municipales de mayo del 2015 es el PSC quien gana las elecciones con bastante holgura con un 33%, el segundo partido bastante alejado es Ciudadanos con un 13%, después Iniciativa seguida del PP. Tan sólo cuatro meses después en las autonómicas del 2015 Ciudadanos se convierte en la primera fuerza con un 23,6% adelantando al PSC que saca un 23% , seguido de JuntsPelSi con un 18% y a continuación Cataluña Sí que es Pot con un 13% (coalición de Podemos con Iniciativa). Y en la misma población en las generales del 20 de diciembre, tres meses más tarde En Comú Podem (el nuevo nombre de la coalición catalana del partido de Ada Colau, Podemos e Iniciativa) es quien gana las elecciones en Hospitalet con un 30% , le sigue el PSC con un 26%, luego el PP y ¡atención! Ciudadanos que había creído que el cinturón rojo se había vuelto naranja pasa a ser la cuarta fuerza con un 12%.

¿Cambian de opinión en Hospitalet cada dos meses? Yo diría que no, la dirección del voto es mucho más coherente de lo que parece. Quizá lo que ocurre es que gran parte votantes “buscan” una alternativa de izquierdas que tenga también una posición clara con la defensa de un proyecto de unidad y como no la “encuentran” optan por una candidatura u otra en función de la coyuntura. En las elecciones municipales optan por el PSC, en las autonómicas para hacer frente a la propuesta independentista de JuntsPelSi el voto se inclinó a Ciudadanos y en las generales para frenar los recortes votaron la opción que valoraron más útil, Barcelona En Comú.

Es el momento de dar respuesta a esta “búsqueda”. Para redistribuir la riqueza y llevar adelante un proyecto de progreso hay que abrir paso a una izquierda que defienda con firmeza y convicción la unidad de todo el pueblo de las nacionalidades y regiones de España, a la vez que su diversidad enriquecedora. Como co-portavoz de Recortes Cero quiero hacer un llamamiento a todas nuestras agrupaciones y simpatizantes a difundir esta alternativa y muy en especial en el cinturón industrial.

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